Entrevista: Mikel Lasa, Responsable de Marca y Comunicación de Etxepare Euskal Institutua, nos habla de comunicación, cultura y futuro

Mikel Lasa, Responsable de Marca y Comunicación de Etxepare Euskal Institutua

Mikel Lasa, Responsable de Marca y Comunicación de Etxepare Euskal Institutua

Hoy inauguramos esta nueva sección en el blog ThinkingPr conversando con Mikel Lasa, Responsable de Marca y Comunicación de Etxepare Euskal Institutua, uno de los organismos con los que hemos tenido la oportunidad de trabajar en los últimos años.

Antes de nada, cuéntanos un poco, ¿quién es Mikel? y ¿qué es Etxepare?

Etxepare Euskal Institutua es un organismo autónomo del Gobierno Vasco. Nuestro fin es promover y dar a conocer internacionalmente el euskera, la cultura vasca y la creación contemporánea, y construir relaciones duraderas con otros países y culturas a través de ellas. Para ello fomentamos actividades artísticas, y apoyamos la movilidad de creadores/as, artistas y profesionales de los sectores culturales, así como la enseñanza del euskera y de la cultura vasca. También fomentamos la colaboración con agentes internacionales tanto en el ámbito cultural como en el académico. Y Mikel Lasa es el responsable de marca y comunicación del Instituto, que tras trabajar en distintos ámbitos de la comunicación, como son el periodismo, la publicidad o la comunicación corporativa, ahora trata de aplicar todo lo aprendido para tratar de proyectar la cultura y creación contemporánea vascas en el exterior de la forma más atractiva posible.

¿Qué papel juegan las relaciones Públicas en tu día a día?

Las relaciones públicas, y en particular, las relaciones con medios de comunicación forman parte del día a día de nuestra actividad como organización. A nivel de País Vasco es importante que la opinión pública conozca y legitime la actividad del Instituto, y a nivel internacional nuestro objetivo está encaminado a proyectar la cultura vasca de forma atractiva, dejando en un segundo la institución, que es un mero vehículo para ello. Otro de nuestros públicos prioritarios es el sector cultural del País Vasco, que al fin y al cabo son nuestros “clientes”, a quienes prestamos servicio. Nuestros objetivos de comunicación para cada uno de estos públicos son diferentes, y utilizamos distintas herramientas para acercarnos a ellos.

Desde tu punto de vista, ¿cuáles son las habilidades que un director de comunicación debe tener para desempeñar sus funciones?

La capacidad estratégica es un fundamental en un director o directora de comunicación, tener puestas las luces largas, y mantener el rumbo, a pesar de que el día a día nos lleve a realizar giros o modificar rutas. Es muy habitual que en el día a día tengamos que resolver un montón de cuestiones operativas, especialmente en organizaciones pequeñas, y a veces no es fácil mantener esa visión a largo. A eso le sumaría ser resolutivo y entender y ser capaz de manejar todos los ámbitos de la comunicación, aun sin ser especialista en ninguno de ellos.

¿Cuáles son las herramientas sin las que no podrías trabajar?

Si te refieres a herramientas de trabajo, con un móvil, un ordenador, programas básicos de ofimática y de edición, y acceso a todos nuestros archivos en la nube podría trabajar prácticamente desde cualquier sitio.

Cuéntanos, ¿hay algún proyecto que recuerdes con especial cariño?

Hay tres, que por su alcance, complejidad y resultados subrayaría. El primero es Scotland Goes Basque 2019, la temporada cultural que promovimos en Escocia, con presencia de casi 100 artistas en algunos de los eventos culturales más importantes del país, y en el que el esfuerzo de comunicación para una organización de nuestras dimensiones, fue enorme, tanto allí como aquí. El segundo sería el desarrollo y activación de Basque., la marca paraguas para la proyección exterior de la cultura vasca. Y el tercero, el proyecto de rebranding del Instituto.

Parte de vuestro trabajo consiste en apoyar la cultura vasca a nivel internacional, ¿Cómo estáis viviendo desde Etxepare esta situación de crisis sanitaria en vuestro día a día?

El día a día del Instituto se ha visto alterado completamente por la COVID-19. Todo el equipo hemos estado teletrabajando, afortunadamente, estábamos relativamente preparados para una circunstancia de este tipo ya que por la propia naturaleza de nuestra actividad, con cierta frecuencia trabajamos desde fuera de nuestra sede. Gran parte de la actividad programada (exposiciones, conciertos, conferencias, festivales, etc.) se ha cancelado o pospuesto hasta otoño. Y hemos hecho todo lo que estaba en nuestras manos para adaptar nuestras ayudas al sector cultural a las circunstancias actuales. El sector cultural es muy vulnerable y ahora mismo lo está pasando realmente mal. Prácticamente todas las subvenciones que ofrecemos están orientadas fomentar la movilidad internacional de nuestros creadores, estamos bastante limitados en ese sentido. Pero hemos introducido modificaciones en las subvenciones para facilitarles las cosas en la medida de lo posible.

¿Crees que esta crisis cambiará de alguna manera la forma en la que consumimos cultura?

No soy experto y no me atrevería a vaticinar grandes cambios. No cabe duda que el consumo de productos audiovisuales está evolucionando muy rápido, y que también está habiendo cambios en el sector del libro, que no sé si esta pandemia los acelerará. Pero me resulta difícil imaginar otros modos de disfrutar de una exposición, un concierto u una obra de teatro. Lo que si me gustaría, y eso es más un deseo que otra cosa, es que valoráramos de otra manera el trabajo de nuestros artistas y creadores/as y que estableciéramos los mecanismos para allanarles el camino. La cultura no puede ser puro activismo. Y en nuestro entorno, y en particular en lo que se refiere a la creación cultural en euskera, se acerca mucho a eso.

Poniendo la vista en el futuro ¿a qué retos os enfrentáis desde Etxepare?

A nivel interno, estamos inmersos en plena transformación digital que va desde implementar la posibilidad de llevar a cabo todos los trámites de forma telemática (solicitudes de subvenciones, convocatorias, etc.), implementación de un nuevo programa de base de datos, trabajo en la nube, nueva web, etc. con la que esperamos ofrecer más y mejores servicios. Y a nivel externo, el próximo reto es el programa cultural que vamos a llevar a cabo en Quebec y que debido a la COVID-19, arrancaremos en el último trimestre del año o en 2021.  Y en general, a nivel estratégico, considero que debemos ir evolucionando desde un discurso de “estos son mis –`productos` y los coloco en el escaparte internacional” (y que por supuesto, hay que hacer) a otro de cómo podemos contribuir desde la cultura, y en particular desde la cultura vasca, a aportar nuevas narrativas, propuestas, respuestas… a desafíos globales. Esa será la forma de ser relevantes, considero que debemos ir virando hacia esa dirección.